Cuando entrenas con regularidad, lo normal es que en algún momento aparezca una molestia, una sobrecarga o incluso una lesión. No significa que estés haciendo algo mal, pero sí que hay que parar, revisar y adaptar. Y en eso, la fisioterapia deportiva puede marcar la diferencia.
En este artículo vamos a contarte, cómo trabajamos cuando llega alguien con una lesión deportiva o con ganas de evitarla.
Aquí no vas a encontrar fórmulas mágicas, pero sí información útil que te va a ayudar a entrenar con más criterio. Te contamos:
Dolor anterior, sensación de rigidez, molestias al bajar escaleras… Lo que empieza como una leve incomodidad puede acabar en una condromalacia o una tendinitis que limita tu entrenamiento durante semanas.
A veces el problema no es el primer esguince, sino que no se recuperó del todo. Un tobillo inestable te condiciona en carrera, en campo o incluso al caminar rápido por la calle.
Si haces fuerza, natación o deportes con gestos por encima de la cabeza, el manguito rotador puede darte problemas. Y cuando molesta, cuesta dormir, levantar peso o incluso lavarte el pelo.
Saltarse descansos, hacer siempre lo mismo o entrenar sin variar intensidades puede acabar en contracturas, roturas fibrilares o fatiga acumulada. Y eso, si no se trata bien, se repite.
No hay dos personas iguales. Por eso, en consulta lo primero es evaluar: cómo te mueves, dónde cargas más, cómo respiras o cómo te enfrentas a tu gesto deportivo. A partir de ahí, el plan.
No todo se soluciona estirando. Necesitas trabajo de core, fuerza excéntrica (como los famosos nórdicos para isquios), equilibrio, control motor… Cosas sencillas pero que tienen mucho sentido cuando se hacen bien.
Muchas lesiones no vienen de un mal gesto, sino de acumular fatiga sin darte cuenta. Dormir mal, entrenar más de lo que toca o no variar lo suficiente. En consulta trabajamos también esto: revisar cómo planificas.
Controlar dolor, bajar inflamación, ayudarte a moverte mejor. A veces con hielo, otras con terapia manual suave, otras con vendajes.
Es momento de empezar a trabajar. Movilidad, fuerza sin dolor, ejercicios que te activen sin forzar. Aquí es clave la comunicación: saber hasta dónde y cómo.
Entrenamiento adaptado. Empezar a meter el gesto deportivo. Estabilidad, control, fuerza funcional. Aquí ya te acercas al deporte, pero con criterio.
Lo ideal es hacerlo de la mano de tu fisio, tu entrenador y tu cuerpo. Hacemos pruebas funcionales, test, y sobre todo, hablamos contigo: ¿cómo te sientes? ¿hay miedo? ¿estás preparado?
Si llevas días entrenando con molestias, no lo ignores. Cuanto antes lo veamos, antes se soluciona.
El dolor es solo una parte. Hay que recuperar fuerza, control, movilidad. Si no, la recaída está servida.
Cada cuerpo es diferente. Lo que le fue bien a un amigo, a ti puede no funcionarte. Por eso en CEP Juan Ruiz López el plan es tuyo, no de otro.
No es solo tratar un músculo. Es acompañarte. Ver qué te frena, qué necesitas, cómo podemos adaptarlo a tu vida y tu deporte.
Con tu entrenador, tu médico deportivo o contigo si entrenas por tu cuenta. Queremos que lo que hagas tenga sentido y te ayude de verdad.
¿Tengo que estar lesionado para venir?
No. De hecho, venir antes es lo ideal. Podemos detectar fallos, compensaciones o patrones que a la larga te darían problemas.
¿Vale la pena hacer fisio si entreno por mi cuenta?
Sí. Sea cual sea tu nivel, entrenar sin dolor y con seguridad mejora tu rendimiento y te da tranquilidad.
¿Qué diferencia hay entre la fisio deportiva y la “normal”?
La deportiva está más orientada a movimiento, prevención y gesto técnico. Pensamos en cómo vuelves a entrenar, no solo en que deje de doler.
Entrenar con cabeza, con ayuda y sin prisas. Ese es el camino. Si notas que algo no va como debería, si quieres prevenir o si necesitas volver después de una lesión, estamos aquí para ayudarte.
En CEP Juan Ruiz López, trabajamos contigo, no solo contigo “como paciente”. Porque lo importante no es solo curar, sino que puedas seguir disfrutando de lo que haces, con seguridad y confianza.
Volver a andar, mover el brazo sin miedo o simplemente dormir sin dolor. A veces, eso que dabas por hecho…
Vamos al grano. En Madrid, donde cada minuto vale su peso en café con prisas, tener un entrenador personal no…
Entrenar no es solo moverse. Tampoco se trata de cansarse sin más. Quien ha entrenado con nosotros lo sabe: el…
La información sobre salud y deporte está por todas partes. Basta con abrir Instagram y ya tienes mil rutinas de…
Entrenar es positivo. Moverse es salud. Pero hacerlo sin una guía, sin una observación externa, puede llevarnos a repetir errores,…
¿Cansado de hacer ejercicios que no tienen sentido para tu día a día? El entrenamiento funcional es mucho más que…